Antes de comenzar a leer este pasaje, te aconsejaría que si no has visto la tercera temporada de Juego de Tronos y/o no has leído los libros y tienes intención de hacerlo bajo ningún concepto sigas leyendo. Hay momentos en la vida que hay que vivir con la mayor intensidad posible, y hacerlo muy seguramente te privará de aquello que es para mí, uno de las mejores momentos de la historia de la televisión:
Como pudiste ver (o no) en esta fantástica serie de HBO, tras el injusto encarcelamiento de Ned Stark, su hijo Robb inicia una serie de movimientos estratégicos entre cuyos primeros objetivos fijaron la liberación de la fortaleza ancestral de Aguasdulces que se encontraba sitiada por Jamie Lannister (Tío/padre del responsable de la posterior muerte de Ned Stark). Sin embargo, para liberar del sitio de los responsables de la desfavorable situación de su familia sus tropas no podían avanzar sin acordar el paso por un lugar clave conocido como "Los Gemelos", y una de las condiciones que se establecieron para ello era clara: Robb tenía que casarse con una de las hijas del señor del cruce.
A regañadientes y cegado por la ebullición de acontecimientos aceptó* y prometió cumplir el compromiso de nupcias, sus tropas pudieron avanzar, y consiguió su objetivo. No obstante, a pesar de ser un hombre de honor como su padre, cuando el amor llamó a su puerta al conocer a una joven llamada Jeyne Westerling, decidió incumplir su promesa, compensar al señor de "Los Gemelos" de alguna otra forma y casarse con aquella que había prendido el fuego en su corazón.
Tiempo después, cuando Robb Stark empezaba a convertirse en todo un mito mientras se afirmaba como "Rey en el Norte", volvió a necesitar del favor del señor de "El Cruce" en otro movimiento que de contar con su apoyo le colocaría en una situación privilegiada para despojar a los Lannister de "El Trono de Hierro". En compensación, su primo, liberado tras el asedio de Aguasdulces se casaría con una de sus hijas, y tras varios comentarios despectivos, reproches y vejaciones por haber incumplido su palabra, Walder Frey aceptó el compromiso y se anunció la boda.
El día del evento, todos disfrutaron de suculentas comidas y embriagadoras bebidas acompañados por los mejores músicos, y en el momento en que la pareja se retiró a consumar el matrimonio, el invitado de honor Robb Stark, su encinta esposa, su madre y sus más de 3.000 vasallos fueron asesinados a sangre fría por el señor de Los Gemelos en lo que pasó a la historia de los seguidores de la serie como "La Boda Roja". El motivo... la ofensa que supuso para Walder Frey que "El Rey en el Norte" rompiera su promesa de convertir en reina a una de sus hijas.
Tiempo después, cuando Robb Stark empezaba a convertirse en todo un mito mientras se afirmaba como "Rey en el Norte", volvió a necesitar del favor del señor de "El Cruce" en otro movimiento que de contar con su apoyo le colocaría en una situación privilegiada para despojar a los Lannister de "El Trono de Hierro". En compensación, su primo, liberado tras el asedio de Aguasdulces se casaría con una de sus hijas, y tras varios comentarios despectivos, reproches y vejaciones por haber incumplido su palabra, Walder Frey aceptó el compromiso y se anunció la boda.
El día del evento, todos disfrutaron de suculentas comidas y embriagadoras bebidas acompañados por los mejores músicos, y en el momento en que la pareja se retiró a consumar el matrimonio, el invitado de honor Robb Stark, su encinta esposa, su madre y sus más de 3.000 vasallos fueron asesinados a sangre fría por el señor de Los Gemelos en lo que pasó a la historia de los seguidores de la serie como "La Boda Roja". El motivo... la ofensa que supuso para Walder Frey que "El Rey en el Norte" rompiera su promesa de convertir en reina a una de sus hijas.
Evidentemente estamos hablando de una fantástica manifestación de ficción, y las situaciones en líneas generales no suelen ser tan extremas, pero valorando lo expuesto en este pasaje, podría destacar que las prisas no suelen ser buenas consejeras, o que cualquier decisión trascendental debería estar basada en la reflexión; pero lo realmente importante es que aunque seamos dueños de nuestros actos...
... somos esclavos de nuestras palabras.
Imagen con licencia cc cortesía de Ricardo Sánchez Belmont.
* No olvides leer el pasaje complementario: "La propiedad de la disyuntiva"
PD: Este pasaje se lo quiero dedicar a "mi socio", de quien aprendí esta sabia lección.
PD2: Como suele decirse, la realidad en ocasiones supera a la ficción, y muestra de ello es el descubrimiento que ha compartido conmigo el gran seriéfilo José Luís Marino (@RickGrimesESP). No dejéis de echarle un vistazo al símil de este episodio con la historia del Conde de Douglas en la Escocia del Siglo XV.
... somos esclavos de nuestras palabras.
Imagen con licencia cc cortesía de Ricardo Sánchez Belmont.
* No olvides leer el pasaje complementario: "La propiedad de la disyuntiva"
PD: Este pasaje se lo quiero dedicar a "mi socio", de quien aprendí esta sabia lección.
PD2: Como suele decirse, la realidad en ocasiones supera a la ficción, y muestra de ello es el descubrimiento que ha compartido conmigo el gran seriéfilo José Luís Marino (@RickGrimesESP). No dejéis de echarle un vistazo al símil de este episodio con la historia del Conde de Douglas en la Escocia del Siglo XV.
Si señor, muy muy bueno, gran resumen y mejor reflexión!
ResponderEliminarLa reflexión nace fruto de una conversación con nuestro amigo Francisco Aranda. Un artista en toda regla, al igual que aquél que comienza los comentarios en este pasaje ;)
EliminarComo siempre, brillante.
ResponderEliminarAluciné con ese capítulo. Si la audiencia se echó las manos a la cabeza con la Boda Roja, tengo entendido, de fuentes cercanas y fiables, que la 5º temporada y la 6º habrá infartos entre los espectadores. Un abrazo Pepe!!
Gracias tío! Me alegra que te encante.
EliminarLa verdad es que fue un alucine total, y eso que ya esperaba algo fuerte en el episodio.
Este jueves habrá un pasaje complementario ;)
Por la boca muere el pez...
ResponderEliminarEn este capitulo se puede apreciar claramente lo que hace grande a esta serie: lo verosímiles o reales que pueden resultar los personajes. Haciendo una analogía con los juegos de rol, no existen alineamientos exactos, (nadie es puramente bueno o malo, como Frodo y Sauron en "El Señor de Los Anillos") y todos los personajes tienen/sienten sus propios conflictos morales, que también se presentan en el caso de los personajes que tienen, quizás, un alineamiento más claro (como los Stark). En el caso de Rob, su conflicto moral se presenta entre dos sentimientos o posturas "buenas", pero enfrentadas en este caso, actuar conforme dicta su honor o conforme dicta el amor. Rob resuelve su conflicto en favor del amor, pero Walder Frey lo resuelve, de forma salvaje y sangrienta, en favor del honor.
ResponderEliminarEnorme comentario.
EliminarCreo recordar que Sturm Brightblade (Dragonlance) también tuvo "un percance" por mantener su honor.
¡Bien dicho!
ResponderEliminarImpresionante este capítulo, aún lo estoy digiriendo porque va a dar un vuelco narrativo total a la serie.
ResponderEliminarTodavia quedan Stark...y venganza
ResponderEliminarAria es la gran esperanza :)
EliminarComo siempre, acertado, y no menos frecuente es sorprenderme con tus conclusiones casi tanto (porque igual es harto complicado) como al ver la Boda Roja.
ResponderEliminarTras cada serie hay verdades como puños latentes esperando a que Pepe Arjona no las extraiga y sirva en bandeja de plata.
Grande.
Señor Elengor...
Eliminar... grandes son también sus palabras y mi satisfacción al leerlas. Gracias por ellas y por comentar.
Que La Fuerza te acompañe.
Brutal análisis Pepe. Grandísimo capítulo y mejor artículo. Esas palabras que decimos... Esas promesas que no cumplimos...
ResponderEliminarDesde luego, el episodio es enorme y facilitó mucho la presentación de un mensaje que llevaba tiempo esperando en la recámara. Respecto a éste, es difícil, pero aunque parezca lo contrario somos dueños, pero podemos tender a ser esclavos.
ResponderEliminarGran fichaje como seguidor el señor Friedman, sí señor!
Enorme reflexión o moraleja Pepe. Ya se sabía por episodios anteriores que para Walter Frey una promesa rota era la mayor de las afrentas.
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